martes, 12 de mayo de 2015

Lastres

Una de las mejores cosas que me han pasado en este tiempo es que he eliminado muchos lastres, tanto emocionales como físicos. Vivir con ellos es lo peor que nos puede ocurrir. Nos impiden avanzar a la velocidad deseada, impiden el crecimiento personal, nos acotan la vida, queramos o no. 

Hubo un tiempo en que, ingenua de mí, pensaba que me había deshecho de ellos, de todos los importantes, pero no, era mentira. Me creé una ilusión motivada por la falsa creencia de que no debía huír, cuando en realidad lo que iba a hacer era aligerar mi equipaje en todos los sentidos. Y sólo me di cuenta cuando ya no los tenía.

Uno de los más importantes fue deshacerme de la casa en la que viví los últimos 15 años de mi vida, una casa en la que hubo más disgustos y dolor que alegrías y emociones positivas. Una casa que, sin saberlo, me fue comiendo por dentro, agotando mi corazón y no permitiéndome ser feliz. Pero al final lo he logrado. 

La vendí hace poco menos de un año, y cuando por fin entré en la que va a ser sólo mi casa, ese día me sentí ligera, feliz, contenta, plena...

Fue un proceso largo que llevé a cabo sola, y que me ayudó muchísimo a la hora de sentirme más madura y consciente de mi fuerza. Que sí, que parece mentira que estas cosas me ocurran a mi edad, pero es mejor tarde que nunca, y lo recomiendo a todos, vivid sin demoras, sin lastres, sin los "ya lo haré" que nunca se hacen, os aseguro que la vida es mucho mejor así!

Ahora vivo en un piso que es menos de la mitad de la casa, con todo a mi gusto, me estoy rodeando de todo lo que deseo ver en cada momento, de lo que no me canso de mirar, de colores, de emociones positivas y alegrías. Con mis hijos, con mis amigos y conmigo misma, porque hoy me quiero más que antes.

Y aunque también está habiendo tristezas, que ya contaré más adelante, me he propuesto borrarlas, que la suma sea siempre positiva, no negativa, que la vida realmente es muy corta ya para andar con tonterías.








2 comentarios:

Nicolás dijo...

Felicidades, resulta duro y dificil dar el paso y lanzar esas cargas lejos, pero cuando se hace uno vuela en libertad

beth__ dijo...

Yo aún en silencio... estoy a tu lado