domingo, 30 de noviembre de 2008

Inquieta y expectante


Tengo puesto en mi messenger Inquieta y expectante, así es como me siento. Me siento viva por primera vez en mucho tiempo. Siento la vida a mi alrededor, en mis hijos, en mis amigos, en las personas que pasan a mi lado, la siento en todas partes, burbujeante, latiendo. Una veces alegre, otras triste, o amarga, pero está y la siento. Pasa a través de mí, y me llena.

Estoy expectante porque sé que se está produciendo el cambio, sé que estoy en el camino, no sé muy bien hacia dónde o cuándo terminará, pero estoy en él, y eso es vida también. Ya no estoy sentada viendo pasar los días, ni estoy arrastrando mi cuerpo sin saber por dónde. No, ahora tengo las riendas yo, por fin manejo mi vida, por lo menos hasta donde me dejan las circunstancias, pero ahora no les temo, si son contrarias haré que se vuelvan favorables.

No me engaño, eh! Que no va a ser fácil seguir en el camino, pero la sensación que estos días tengo merece la pena, y por ello quiero seguir andando y estando viva. No deseo dejar de sentirla, y quisiera que fuera cada vez más plena.

Tenía que decirlo.

jueves, 20 de noviembre de 2008

Pornografía infantil, no!


Porque estoy en contra de cualquier abuso contra menores, sea del tipo que sea. Son el futuro de la tierra, si no dejamos que crezcan sanos física y mentalmente, qué les estamos dejando?


Qué necesidad hay de que sufran más de lo necesario? Bastante nos da la vida normal y corriente, como para que encima adultos desequilibrados les dañen más. Ojalá pudiéramos terminar con estos abusos de una vez por todas. No voy a entrar en discusiones sobre dónde radica el problema de los que abusan. Me centro en lo que podemos hacer, en estar alertas y a la mínima duda denunciar y poner en manos de profesionales esas dudas. Me refiero a no permitir que situaciones conocidas se prolonguen por un falso sentido de la intimidad. Me refiero a tener el valor de denunciar si sospechamos que algo está ocurriendo.
.
Sólo con la colaboración de todos podremos frenar esta avalancha de dolor, de miedo, de horror que muchos niños están sufriendo. Es nuestro deber como adultos, como individuos, tratar de mejorar la vida de los niños.




Si navegando por la Red, usted se topa con una web o un mensaje que promueve o difunde pornografía infantil, denúncielo a la Policía, telefoneando al 902 102 112, vía internet a través de la e-página del Grupo de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil o bien póngase en contacto con Anesvad...