jueves, 9 de octubre de 2008

Duelo


Hoy ha muerto un amigo mío, querido, apreciado, y valorado por mí. Entre otras cosas era mi abogado, y el marido de una amiga. Hoy al llegar al hospital para verle, sabiendo que estaba muy mal ya, y que sería inminente, me lo he encontrado ya muerto. Su mujer está destrozada, sus hijos también, y todos los que le queríamos sufrimos por su pérdida, que no por él, puesto que ya dejó de sufrir. Tenía 51 años, era aún joven.

Tema manido, la muerte, por todos hablado, por todos pensado y alejado, pero no por ello voy a dejar de escribirlo.

Vivimos dos días, y los malvivimos, desperdiciamos mucho tiempo en quejas, en trabajar de más, en no disfrutar de todo lo que tenemos, en añorar lo que no tenemos o lo que posee el otro. Perdemos la vida en desear y no vivimos nuestra realidad, sea la que sea. La capacidad de disfrutar de la vida la tenemos todos, desarrollémosla, dejemos que nos llene y seamos felices, con esos pequeños momentos que todos tenemos. Con lo importante y lo banal, con lo profundo y con lo ligero, con los sentimientos y las emociones, con todo lo que nos pone al alcance de la mano.

Hace unas horas me desahogaba con un amigo querido por mí, le decía que debemos cambiar ciertas actitudes ante la vida y la manera de vivirla. Y me hago el firme propósito de llevarlo a cabo. De vivir lo que deseo vivir, de tener lo que deseo tener, de disfrutar todo lo que pueda, siempre con respeto y sin dañar, pero con mi libertad.

Sí, mil veces se dice, mil veces se piensa, pero sólo una se hace, VIVAMOS.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Físico


Otra de las razones por las que estoy contenta es que estoy adelgazando. Me está costando un mundo, no por dejar de comer, que esta vez no he tenido problema, me he mentalizado que debo cuidarme, comer racionalmente y bien, sino porque la báscula no va todo lo rápido que a mí me gustaría. Le he visto las orejas al lobo, y no puedo permitirme ya el lujo de no prestar atención a la salud.

Por ese motivo comencé a comer bien, una dieta equilibrada, y sobre todo a sentarme a comer. Porque antes no comía, malcomía. Es muy típico que cuando se tiene costumbre de cocinar para muchos, si no se tiene que hacer, ni siquiera se haga para uno mismo, y eso es lo que yo no hacía, cocinar para mí sola.

Ahora sí, ahora lo hago de forma organizada y equilibrada, y he perdido 5,5 kilos, sí, que no está nada mal, aunque no sea nada en la inmensidad de kilos que aún me quedan por perder. Pero los he perdido muy lentamente, desde el mes de Julio, es decir en tres meses y medio. Con lo poco que cuesta cogerlos!!!!!

En fin, que seguiré así por salud, por mí misma, porque de nuevo me voy encontrando mejor, y lo más importante, porque quiero.

martes, 7 de octubre de 2008

Sigo avanzando


Tengo mucho que contaros, entre otras cosas, que mi curso va viento en popa. Estoy aprendiendo muchísimo, en algunas ocasiones recordando lo que ya sabía, lo que el sentido común y la lógica dictan, pero también aprendo dinámicas de grupos, estrategias para llevar adelante una clase con adultos.

Por cierto, mira que somos difíciles los adultos, cuando creemos que algo sabemos, lo tenemos que demostrar a toda costa. Una de las cosas que ocurren en este curso al que voy, es que se ha creado muy buena relación entre todos, y hay una gran confianza, lo que está generando que algunos se abran y hagan terapia con los demás.

Eso en sí mismo no es molesto, sólo crea impotencia cuando me doy cuenta de que algunos tienen graves problemas en algún área y no les puedo ayudar. Eso sí, impera el respeto en todo momento, por lo que espero que el hecho de exponerlo y sacarlo del interior, ya sea suficiente para poner en marcha mecanismos distintos que les ayuden a afrontarlo.

Otra de las cosas, es que cada vez veo más factible el poder impartir clases yo. Tengo ya un curso en marcha, hablemos con propiedad, tengo el proyecto en marcha., y junto con él, me gustaría realizar dos o tres más. Ofrecerlos y confiar en que la gente quiera hacerlos. Ya os contaré sobre ello otro día.

Por otro lado, me ha llamado una persona para hacer coaching!!! Sí, yo que lo creía perdido y olvidado, pues no, alguien lo necesita y me ha llamado, pero hay que ver lo que les cuesta ponerse en marcha para ayudarse. Ya os contaré la continuación, si es que hay.

Y por lo demás, contenta con el ritmo que tengo ahora, estoy ocupada casi todo el día, lo que no me deja tiempo apenas para estar en el ordenador, y cuando estoy necesito buscar cosas o trabajar en mis proyectos, lo que me encanta. Es la sensación de aprovechar el tiempo, de tener una finalidad, de darle sentido a muchas cosas, y no quiero perderlo, por eso me estoy esforzando y me lo estoy trabajando.

Me siento muy bien, más firme y decidida y lo mejor de todo es que me divierto y lo paso bien!